«Nous pouvons rendre notre planète plus intelligente. Tous nos modes de fonctionnement sont concernés. Qu’il s’agisse de notre façon de produire, de vendre, de déplacer les objets, de transporter les gens, de transférer l’argent… Le monde est prêt pour une planète plus intelligente. Découvrez comment la bâtir ensemble».
“Caracas Ciudad de despedidas” es un corto de 17 minutos y pico, que desde al menos el 3 de mayo de 2012 se puede ver vía youtube y que expresa lo que piensa y lo que siente una porción de la juventud de los estratos socioeconómicos A y B de la sociedad Capitalina.
Lo cierto es que más allá de la calidad técnica del video que no es lo importante en este minuto, “Caracas Ciudad de despedidas” nos deja entrever por su contenido y discurso y por lo que encarnan los personajes entrevistados una gran tragedia para la sociedad venezolana: los jóvenes que integran la élite social hablan con un desprecio rampante sobre la ciudad o más aún sobre la sociedad que les ha nutrido, que los ha hecho en gran medida lo que son. Al respecto una de nuestras reflexiones es: si la élite, si los que están llamados a definir los grandes rasgos de nuestra sociedad futura tienen una visión tan corporativa y pragmática sobre lo que es Caracas y a resumidas cuentas el país: ¿Quiénes serán los que diseñarán los parámetros bajo los que se regirá nuestra sociedad en el provenir?
Lo otro que expone el video es lo poco dialógica, intolerante y hasta violenta que es la sociedad venezolana actual, pues la reacción de más del 90% de los que comentaban en las redes sociales sobre el corto era ciertamente desmedida, llena de toda clase de improperios (puro y duro Bullying Digital o lo que es lo mismo: intimidación u hostigamiento digital). Cuestión que liquidó la posibilidad de generar una discusión sobre el sentido profundo del video.
“Caracas ciudad de despedidas” nos muestra además un tema crítico para la sociedad venezolana, una situación que quizás pasa desapercibida, pero a diferencia de nuestros vecinos (Brasil, Colombia, Ecuador, Bolivia, entre otros) en Venezuela quienes se van son los mejor educados, los que poseen mayor capital cultural, social y hasta económico. Y a los efectos prácticos de nuestra sociedad eso sin duda que debe tener un hondo impacto.
Nuestra contesta al video es que una sociedad se transforma a partir de los jóvenes y por muy mal que esté un país siempre hay posibilidades de tirarle para adelante, sólo que para eso se requiere esfuerzo, compromiso, capacidad de asociarnos con el otro que es distinto a mi, pero que desea lo mismo: una mejor Caracas, en fin: un mejor país.
Finalmente, podemos estar en desacuerdo con el video, se le puede criticar, pero lo que no debemos albergar como deseo es suprimirlo, censurarlo, despacharlo sin más ni más, porque al fin y al cabo esos 17 minutos y fracción son una forma válida de mirarnos.
Hoy sólo se escucha sobre México: violencia, drogas, mafias corrupción y la guerra frontal que tiene el gobierno central contra los carteles de la droga.
Sin embargo, México es la Décima Primera (11) economía del mundo, con un fuerte acento puesto en las manufacturas. Además esta nación es la Décima (10) potencia turística del planeta. Y esto sin hablar de la rica cultura y gastronomía con las que cuenta este vasto país que es Caribeño, pero a la vez Norteamericano e incluso Centro Americano.
Ahora bien, la que quizás es la “riqueza latente” más significativa de México es su densa y bastante extendida red de ciudades que suponen un activo importantísimo ya que son una base urbana ya existente que es uno de los requerimientos indispensable para promover niveles superiores de desarrollo en cualquier Nación. Es así como vemos que este país cuenta con:
Ciudad de México que con sus más de 19 millones de habitantes es la segunda ciudad más poblada del mundo.
3 ciudades con poblaciones entre los 4 y 2 millones de habitantes.
8 ciudades con al menos 1 millón de habitantes.
19 ciudades con poblaciones de entre 500 y 900 mil habitantes.
Es imperativo, entonces, que la próxima vez que pensemos en México veamos más allá de las noticas tremendistas, pues en este vasto país de más de 110 millones de habitantes hay un tesoro al cual aún le falta mucho para ser explotado plenamente: sus ciudades, que son diversas, multiculturales y muchas de ellas centros de saber y producción de envergadura para nuestro continente.
Por años este columnista ha denunciado el menosprecio a los caraqueños, sobre todo a los de menores ingresos, que revela la pésima calidad del transporte público superficial de la ciudad, agravada ahora por el deterioro galopante de ese otrora orgullo ciudadano que fuera el Metro. Pero también revela menosprecio a la ciudad en cuanto tal: como su alto costo y su rigidez operacional le impiden a este último cubrir totalmente la mancha urbana, su buen funcionamiento exige integrarlo con un sistema superficial de calidad equivalente, que fue lo que se ensayó, en escala insuficiente, con el Metrobús.
En 2008 la Alcaldía de Chacao tuvo la iniciativa pionera de reestructurar las caóticas rutas del municipio, operadas como en el resto de la ciudad con unidades obsoletas y destartaladas, apoyando a los operadores para sustituirlas por unidades modernas de la mayor calidad y estableciendo normas claras de operación en beneficio de los usuarios. El resultado ha sido un éxito unánimemente reconocido.
Brutalmente asediada por el Gobierno central, que no sólo se las ha ingeniado para despojarla de competencias y recursos sino que además hace de todo por desprestigiarla, a finales de 2011 la Alcaldía Metropolitana inauguró tres rutas del sistema Transmetrópoli que atraviesan los cinco municipios caraqueños. Un logro modesto en términos cuantitativos pero de gran trascendencia cualitativa: por primera vez los habitantes de toda la ciudad, y no ya sólo los de Chacao, pueden disfrutar de un transporte superficial de primera calidad. En comparación el sistema BusCaracas, de la Alcaldía de Libertador y el Gobierno nacional, se ha tragado más de 600 millones de bolívares pero las obras, originalmente programadas para poco más de un año, duran ya casi cuatro sin que haya certeza acerca de cuándo se terminarán.
Transmetrópoli, como Transchacao, demuestra que en Caracas es posible ofrecer un sistema de transporte público superficial confiable y de elevada calidad. La probable victoria de la Unidad Democrática permitirá que el año que viene esos sistemas no sólo conozcan mejoras adicionales, sino que se extiendan por toda la capital y a todas las urbes venezolanas. Estas y otras iniciativas planteadas por la UD permitirán que, en menos tiempo de lo que se imagina, la calidad de vida de nuestras ciudades mejore radicalmente.